EL HAYY MÁS ALLÁ QUE UN RITUAL CORPORAL

 

Todos los pilares del islam se deben cumplir con rituales, pero más allá del ritual corporal debemos encontrar su verdadera esencia en la cual Dios busca en el hombre la verdadera purificación.

ETAPA DE LA PEREGRINACIÓN EXTERIOR COMO RITUAL CORPORAL

Es la peregrinación establecida por los preceptos religiosos, que es la visita a la Kaaba de la Ciudad de la Meca y consiste en:

Etapa

Descripción

1

Preparativos para el viaje, buscar a alguien quien nos guíe.

2

Vestir el hábito del peregrino.

3

Llegar a la Meca en estado de purificación, es decir con ablución.

4

Realizar las sietes circunvalaciones alrededor de la Kaaba, como signo de completa rendición.

5

Recorrer siete veces entre Saf y Marwa.

6

Ir la llanura de Arafat y pararse esperando hasta la puesta del sol.

7

Pasar la noche en Muzdalifa.

8

Hacer el sacrificio en Mina.

9

Ejecutar otras las siete circunvalaciones alrededor de la Kaaba.

10

Beber de la fuente de Zamzam.

11

Hacer dos ciclos de oración cerca del lugar donde el Profeta Abraham se paró cerca de la Kaaba e inicia su regreso a casa

 

Una vez realizado todas las etapas de la peregrinación exterior como ritual corporal, su peregrinación es completa y su recompensa está garantizada, y si algo falta en este ritual corporal, su retribución es cancelada.

Las bendiciones del Hayy (la peregrinación), si bien abarca todos los aspectos de la vida humana y su lluvia de misericordia comprende a todas las esferas, comenzando con la intimidad del corazón y el pensamiento hasta llegar a los ámbitos de la política, la unión y grandeza de los musulmanes y la cooperación de los pueblos islámicos, enriqueciéndolas, revivificándolas y transmitiéndoles el empuje de la vida… pero es posible decir que la llave de todo lo que encierra más allá de un ritual corporal es la búsqueda de la purificación a través del verdadero conocimiento. La principal guía de la peregrinación para quien quiere ver la realidad y explotar el poder que Dios le inspiró para entender “los fenómenos aparentes”, es el conocimiento complementario, mas allá de un ritual corporal, mediante el cual se distingue la peregrinación, y lo cual generalmente los musulmanes no consiguen sino a través del cumplimiento de este precepto. Ningún otro fenómeno religioso puede ofrecer a la Comunidad Islámica ese repertorio completo de nociones, tal como lo hace la peregrinación.

¿CUÁL ES LA ETAPA INTERIOR, MAS ALLÁ QUE UN RITUAL CORPORAL SEGÚN LA ESCUELA DE PENSAMIENTO CHIITA?

Según su excelencia, Wali Amr Al-Muslimin Aiatul-lah Saiied Ali Huseini Jamenei en su mensaje dirigido a los peregrinos de la Casa de Dios en la Meca, en ocasión de celebrarse las ceremonias de la peregrinación del calendario islámico del año 1419 (1998) explica detalladamente el punto fundamental para realizar una peregrinación más allá de un ritual corporal la cual es la adquisición de 5 conocimientos fundamentales, a saber:

Etapa

Nombre

Descripción

1

El conocimiento de uno mismo en el ámbito personal

Significa que el ser humano reflexione en su existencia y examine los puntos de su propia fuerza y debilidad

2

El conocimiento de uno mismo en el ámbito de pertenecer a la gran comunidad islámica

Observar al conjunto de peregrinos y a todas las comarcas que han enviado a su gente a realizar la circunvalación a la casa de Dios, y ver reflejada a toda la gran comunidad islámica en el espejo de los peregrinos.

3

El conocimiento del ideal representado por los peregrino representantes de los miembros de esa comunidad única   

Dar un paso practico en pro de la materialización de esa gran esperanza que es la unión islámica, y por consiguiente la puesta en marcha de una única fuerza islámica en el plano internacional.

4

El conocimiento de la majestuosidad y misericordia de Dios

Es el paraje hacia el cual se dirige la persona piadosa y arrepentida.

5

El reconocimiento del enemigo

Es el resultado de todos esos tipos de conocimiento, y los complementa imperfecciones

 

·         El conocimiento de uno mismo en el ámbito personal: cuando el dinero, la posición, la raza, el rango, el adorno y la vestimenta pierden su valor, y lejos de todos estos referentes, el individuo realiza el tawaf (circunvalación alrededor de la Kaaba), el Sa¨i (trote entre las montañas de Safa y Marwah), reza, corre y se detiene junto a ciento de miles de personas, entre los que están el pobre y el rico, el mandatario y el súbdito, el ilustrado y el analfabeto, el negro y el blanco, todos con una única ropa y en una única explanada, dirigidos a Dios, sometidos a él, contritos ante su Esplendor, Majestuosidad y Poder… allí toda persona reflexiva puede conocer completamente su debilidad y pobreza ante Dios, Glorificado sea, así como posición, su Grandeza, y su Elevación al vincularse al Señor del Universo, y alejarse de toda suposición falsa y envanecimiento en relación a su débil existencia, y romper el ídolo de la soberbia y el egoísmo que le impulsa a las más indignas  actitudes y comportamientos morales; luego, esta persona prueba y experimenta por otro lado la dulzura del vínculo con la fuente de la Majestuosidad, de la comunicación con Él y despojarse de los ídolos de su interior.

Este conocimiento fundamental es el que constituye la esencia de toda adoración y es el contenido de toda imploración, y es el que conforma la entera humildad que surge de los Santos de Dios. Pule al ser humano, suscita la pobreza en su vida, y le prepara para el resto de las diferentes clases de conocimientos, dotándole con la preparación para atravesar los caminos de perfección. Los problemas mundanales, la dedicación exagerada al esfuerzo material y el imbuirse constantemente en la vida diaria, motivan la decidía en el corazón y el descuido, y alejándolo de ese esplendido conocimiento y haciéndolo caer en conjeturas que más se asemejan a los hilos de la tela de araña, originan en él las suposiciones falsas, enturbiando así la claridad de su corazón y el Hayy es el remedio decisivo para ese problema.

 

·         El conocimiento de uno mismo en el ámbito de pertenecer a la gran comunidad islámica: vincula al peregrino con su hermano y su gente de una forma emotiva y real, y anula el embrujo de la separación que fuera lanzada por el viejo y el nuevo imperialismo, bajo el nombre de raza, lengua, tendencia escolástica y nacionalista.

Los políticos que se esfuerzan para que el mundo permanezca en dos polos: el del fuerte y el del débil, o el del opresor y el oprimido, para que de esa forma se dividan los centros de hegemonía entre ellos acosta de los pueblos oprimidos, desde hace dos siglos hasta hoy temen la unificación de la comunidad islámica, y disponen los impedimentos para que ello no se concrete. Esos mismos son quienes pretenden disponer a una Europa que solo sea cristiana, mediante la matanza de musulmanes y através de arrojar diferentes tipos de discriminación y opresión contra las minorías musulmanas en Europa.

 

·         El conocimiento del ideal representado por los peregrinos representantes de los miembros de esa comunidad única: ver al gran conjunto de los peregrinos provenientes de las diferentes regiones del mundo con sus diferentes idiomas, grasas y géneros, amplia los horizontes de la visión de los musulmanes y les hace traspasar los marcos individuales, nacionales y regionales. La obligación del comportamiento fraternal islámico empuja a los musulmanes a conocerse mutuamente y a unificar sus palabras y corazones, a difundir los conocimientos relacionados a los pueblos de las diferentes partes del mundo, y a desbaratar las conspiraciones informativas de los enemigos que constantemente procuran – y especialmente en estos días - trastrocar las realidades y difundir mentiras y rumores. La concentración de los peregrinos en las ceremonias de la peregrinación, en un mismo punto y especialmente durante la permanencia en Arafat, en el Mash´ar y el pasar la noche en Mina, dispone completamente las condiciones para ese conocimiento constructivo y fructífero.  

 

·         El conocimiento de la majestuosidad y misericordia de Dios: dice Dios Altisimo en el Sagrado Coran: <<Ciertamente que la primera casa que fue dispuesta para la gente es la que está en la Meca como bendición y guía para la humanidad>> (Aal Imran 96).

La Meca es el lugar en que se manifiesta la Grandeza de la religión Divina, en una amalgama de majestad, integridad y simpleza, que hace recordar la primera proclama hacia el monoteísmo, que es la estación para concretar la unión de palabra. Porta las huellas de los muyahidín (combatientes) de los albores del Islam, quienes lucharon el ese lugar, habiendo sido expatriados, obligados a emigrar, y oprimidos y quienes volvieron a esa comarca como grandes conquistadores, y la purificación de la vileza de la época de la ignorancia de los árabes (la yahiliiah). Luego, es el lugar en el que se percibe el aroma de los adoradores y el lugar de prosternación de los devotos. Es el lugar anhelado por los corazones de los agradecidos. Es el saliente de la alborada del Islam surgido para las naciones, y el levante por donde emergerá el Mahdy prometido al final de los tiempos. Es el lugar que se orientan los corazones atribulados, y el lugar de esperanza de las almas descontentas.

La prescripción de la obligación del Hayy y la ordenación de sus rituales, portan inicio de grandeza al igual que signos de Misericordia. Mediante ese conocimiento, se agitan los corazones al ver la Sagrada Kaaba en la Gran Mezquita de Masyid-ul Haram, y retornan los extraviados al sendero recto, produciéndose un cambio en las almas de la gente. 

 

·         El reconocimiento del enemigo: si el reconocimiento del enemigo, el deposito del corazón y la mente del creyente se encontrará sin muralla y expuesto al saqueo de los agresores y traidores. Durante los mismos actos de la peregrinación. En arrojar las piedras al Yimar (monolito que simboliza a satanás) representa el conocimiento del enemigo y la lucha en su contra. El Santo Profeta (BP) elevó el llamado a bara´ah (repudio al enemigo) durante la peregrinación, y fueron recitadas las aleyas de la  bara´ah en las ceremonias de la peregrinación mediante el príncipe de los Creyentes, Ali ibn Abi talib (P) si es que la comunidad islámica algún día se libra de la existencia de las fuerzas enemigas, entonces la bara´ah perderá su justificativo, pero mientras exista el enemigo y su actual hostilidad, entonces el distraerse del enemigo y ser negligente respecto a la bara´ah constituirá un gran error y una fatal perdida.

Si los conocimientos mencionados se materializaran, también se concretarían junto a ellos el conocimiento del enemigo del mundo islámico, y cualquier fenómeno, individuo, gobierno o sistema que aleja a los musulmanes de su identidad islámica, o que los lleva a la desunión y al resquebrajamiento, o que no presta atención al hecho de que se concrete la grandeza de los musulmanes y del islam, e infunde la desesperanza de que ello se produzca, en verdad que estará ejecutando la acción del enemigo, y aunque no sea el enemigo mismo, será un ejecutor del mismo.

En el Corán se da a entender con Satanás a las fuerzas del mal, la corrupción y la decadencia, las cuales se disponen en una misma fila enfrentando a los Profetas: <<Y así disponemos un enemigo para cada Profeta, de entre los satanaces de entre los hombres y los genios>> (Al-An am/112).

La mención de Satanás y de sus características se repiten en las páginas del Sagrado Corán, así como repetía su nombre durante el tiempo que duró la revelación. Eso significa que no se debe dejar de tener presente al enemigo, y que el conjunto de los musulmanes no debe estar distraído a su respecto… (Saiied Ali Huseini jamenei- 1 / 4 / 98).

 

 

SERMON DEL VIERNES

POR EL TEOLOGO Y SOCIOLOGO

SHEIJ MUNIR VALENCIA POTES