BENEFICIO RECIPROCA DEL AYUNO ENTRE EL INTELECTO Y EL ESTOMAGO

Uno de los más grandes beneficios que como Guía Espiritual Islámico encuentro en el ayuno es la Cercanía Reciproca que hay entre el Intelecto y el Estómago, por los siguientes puntos:

1.   El ayuno es por salud del estómago y el cuerpo humano. A través del ayuno le regalamos al cuerpo tranquilidad, reposo y consuelo. El intelecto debe amablemente dirigirse al estómago y darle la siguiente orden: “Descansa por unas horas durante un mes lunar”.

Tanto tiempo hicimos las veces de masoquista, llevando y castigando a nuestro cuerpo, en especial al estómago, desde el vientre de nuestra madre. Nuestro principal opresor de nuestro cuerpo, fueron nuestros progenitores que no le pudieron decirle al estómago ¡“Basta y descansa”. Después que salimos del vientre de nuestras madres, nuestros padres continuaron dándonos una alimentación sin dirección de una nutricionista y nos mal educaron a que no tuviéramos control del manejo del sano crecimiento. Cuando tuvimos uso de razón continuamos volviendo a nuestro cuerpo un basurero y cementerio de comida “chatarra”, hicimos un estoma torpe, mudo, sordo y ciego, sólo que cumpliera nuestras órdenes y aguantara a llevar las cargas de nuestros vicios y adiciones como un burro; le decíamos! “Come sin preguntar porque”; trasnocha sin un horario que te detenga hasta que pierdas la razón y pongas en peligro a todos los demás órganos de mi cuerpo.

Desde que nacimos no le dimos un descanso al estómago, llevamos años maltratándolo, castigándolo. ¿Por qué no pensamos darle un premio vacacional al pobre e indefenso estomago?

“Comer para vivir, no vivir comiendo”.

2.   El darle el descanso que se merece el estómago es por una orden divina.

Dios Altísimo en el Sagrado Corán nos exhorta al ayuno y nos dice que es una tradición de todos los profetas: “!oh, los que creéis! Se os ha ordenado que ayunéis, de la misma manera que fue ordenado a quienes os precedieron. Quizás así seáis temerosos de Dios.”>> (2:183).

-         Los monoteístas ayunamos es por la orden dada del Creador Omnipotente. Él es el conocedor de nuestro cuerpo, alma y espíritu y a través del ayuno nos exhorta a purificarnos.

-         Es de tener en cuenta que antes de empezar el ayuno debemos hacer la intención “niat”, esta intención es la que nos protege que a nuestro ayuno no le aparezca enfermedades al cuerpo tal como la gastritis y la úlcera. El creyente sometido a la ley divina dice: “Ayunaré un mes para agradar a mi Creador”. Los musulmanes no ayunamos porque nos gusta aguantar hambre o demostrar que somos los más fuertes de la creación. No hermanos y hermanas, esta acción de ayunar desde la mañana antes de la oración del alba, hasta la caída del sol, aproximadamente 14 horas sin comer y beber, lo hacemos porque es una orden del Omnipotente Creador del ser humano.

-         En el ayuno ordenado por el Creador del Ser Humano, no solamente nos abstenemos de comer y beber, sino de lo más principal de la ética humana, el dejar de mentir sobre Dios y sus mensajeros y también de no enojarnos con nuestros semejantes.

Esta orden divina del ayuno, la recibe nuestro intelecto al leer los Libros Sagrados a través de nuestros profetas inmaculados. Al escuchar dicha orden inmediatamente hacemos la intención del ayuno y le damos la orden al estómago que la recibe satisfactoriamente, porque no reconoce lo que le ayudará a su conservación.

3.   Con el ayuno los beneficios son recíprocos,

 

INTELECTO Y ESTOMAGO

 

-         Si el ser humano hiciera un estudio empírico, encontraría todo lo que nos afecta cuando no le damos un control al estómago y ponemos al estómago a que piense por nosotros. El estómago nos pone horario de comida y el intelecto obedece. Al estómago le ponemos lengua para que decida que sabor de comida es la que quiere. Al estómago le ponemos ojos para que mire su comida predilecta, el intelecto conscientemente lo hace, porque sabe que el ciego estomago solo escogerá una comida “chatarra. El estómago sin cerebro empieza a “gobernar” porque conoce la debilidad de su amo “el pobre intelecto”.

-         Hay un dicho “Hadiz” muy trasmitido por la escuela de pensamiento shiita el cuál dice que cuando nos estén juzgando en la otra vida, Dios Altísimo pone como abogado acusador a nuestros órganos, entonces ellos empezarán a culparnos, diciéndole al Creador Omnipotente, por ejemplo, el ojo protesta porque su amo lo maltrataba haciéndolo mirar lo que él no quería ver, la mano también lo acusa por hacerlo tocar y escribir lo que él no quería, la boca lo culpa por no decir y comer lo que no quería, los pies igualmente lo culpa por hacerlo caminar hacia donde él no le convenía y así sucesivamente, hasta que el hombre se enoja con sus órganos que lo acusan por todo lo malo y pega un grito para que se callen, entonces los órganos responderán: “No, caya tú, mi Señor el Omnipotente, nos dejó a que te obedeciéramos en la tierra, pero acá somos nosotros los que decimos todo lo que tú nos hiciste sufrir, somos nosotros los que hablamos y tú solo escuchas.

-         “Aljamdulil-lah – alabado sea Dios.”

-         Si ayunamos por una orden divina, alabamos al Creador, al intelecto y a nuestro cuerpo, lo que vemos son beneficios reciproco, intelecto y estómago, ellos se comunican y se ayudan, se escuchan y gozan de una hermosa y grandiosa salud. Recíprocamente se aconsejan y el intelecto le dice al estómago el motivo del ayuno y él se lo agradece, y a veces el estómago le hace saber lo que no le caerá bien en su vientre, o por el contrario lo que hace sentir “a su amo” fuerte, ágil y hermoso”.

4.   Esperando la recompensa del Creador de los mundos.

-         Una de la característica especial del ser humano, es la necesidad de la recompensa del Omnipotente y Dios Altísimo nos dice que si ayunamos por una orden de él, recibiremos una purificación (Zakat) y perdón en esta vida y la otra. Aljamdulil- lah. Aunque hay una ayuda reciproca del intelecto y el estómago hay otra mucho más grande la cual es esperando la gracia, perdón y recompensa del Creador.

>>”En verdad, para los Musulmanes y las musulmanas, los creyentes y las creyentes, los obedientes y las obedientes a las órdenes de Dios, los sinceros y las sinceras, los pacientes y las pacientes, los humildes y las humildes ante Dios, los caritativos y las caritativas, los que ayunan y las que ayunan, los que protegen y las que protegen su sexo y los que recuerdan y las que recuerdan mucha a Dios, Dios ha preparado un perdón y una recompensa enorme. Este es el beneficio reciproco en el ayuno del intelecto y el estómago que no se encuentra en libros pero sí en nuestras experiencias y vivencias que quise compartir con ustedes después de más de 30 años que llevo ayunando en la religión del Islam revelada por Dios a nuestro Inmaculado Profeta Muhammad y su bendecida familia Allul Bayt.

 

Sermón del viernes en honor de la fiesta del Rompimiento del Ayuno (IdalFitr) por el Teologo y Sociologo Sheij Munir Valencia Potes.